Es muy importante convencernos y asegurarnos de que el auto usado que vamos a comprar está en buenas condiciones, y revisar antes de comprarlo, que no presente problemas de motor, transmisión, hojalatería o algún otro sistema, o de lo contrario negociar ese tipo de detalles con el vendedor.
Te recomendamos llevar tú lista con los puntos más importantes que debes tomar en cuenta antes de comprar el auto, tómate el tiempo necesario para revisarlo, no te quedes con dudas, observa si el dueño del auto contesta con rapidez y analiza las respuestas que te da. No corras riesgos y trata de ser lo más precavido posible.
A continuación te damos la lista que te será de gran utilidad al momento de revisar el auto usado que quieres comprar:
- Kilometraje: El promedio anual es de 20,000 kms., si excede esta cifra no es muy recomendable la compra.
- Pintura; Observa y toca alrededor del escape, molduras y ventanas, para que te des cuenta si el auto está resanado, mal pintado o trae algunos golpes.
- Hojalatería: Observa y toca molduras, defensas, parrilla y carrocería para identificar si tuvo algún daño y está mal reparado.
- Fugas: Revisa debajo del auto, que no haya marca de gasolina, aceite, anticongelante, agua, etc.
- Llantas: Revisa la presión de cada neumático y el desgaste de la banda de rodamiento, para saber si requieren alineación, además de ver si es tiempo de cambiarle las llantas al auto.
- Oxidación: Revisa alrededor del auto cualquier señal de oxidación, si encuentras alguna ten en cuenta que no existe ninguna solución para detenerla, a menos que reemplaces esa parte.
- Interiores: Revisa que la tapicería no esté muy desgastada, quemada o rota. Levanta los tapetes y busca evidencia de fugas de agua u oxidación en la cajuela. Revisa que no tenga partes soldadas como las manijas de las puertas, espejos, botones de control o algún otro accesorio.
- Sistema eléctrico: Recuerda que las reparaciones de este sistema no son fáciles de identificar y en ocasiones son caras de reparar. Revisa el funcionamiento de las luces y señales, el radio, aire acondicionado, los elevadores de los vidrios y ten en mente que en partes eléctricas nunca hay garantía.
- Mangueras y bandas: Revisa cada una de ellas buscando desgaste o perforaciones.
- Radiador/Anticongelante: Busca corrosión u oxidación alrededor del radiador, si existe suciedad en el anticongelante o bien si hay escurrimiento del líquido.
- Bujías y Cables: Identifica si hay grietas, puntos quemados o desgaste. Un motor en buenas condiciones tendrá bujías con la punta de un color bronce o grisáceo.
- Nivel de Aceite: Revisa que no haya agua en el aceite (monoblock agrietado), aceite extremadamente espeso (se usa para disminuir el ruido del motor), o aceite sucio y delgado con olor a gasolina (problemas internos en el motor).
- Transmisión automática: Retira la varilla del nivel de la transmisión automática con el motor encendido, este debe estar lleno y el fluido rojo brillante, si su color es oscuro o huele a quemado, son señales de que la transmisión requiere reparación.
- Escape: Revisa el color del humo; si es azul indica anillos desgastados, el humo quemado puede indicar válvulas desgastadas o que requiere afinación.
Al momento de manejar el auto, revisa lo siguiente:
- Comportamiento del Motor: Debe ser estable tanto frío como caliente, con suficiente potencia y buen arranque, y debe responder suavemente a través de todas las velocidades.
- Frenos: Deben proveer paradas firmes, rápidas, sin señales de ruidos, jaloneos o que el pedal pierda fuerza.
- Dirección: Debe mostrar control seguro sin cargarse a un lado, sin que se sienta floja, presente ruido o vibración.
- Embrague, transmisión manual: Debe dar respuesta rápida y suave con facilidad en el cambio de velocidades.
- Transmisión automática: Debe cambiar velocidad rápido y suavemente sin golpeteos y sin ruidos.
- Diferencial: No debe presentar ruidos o golpeteos.
- Suspensión: Si el auto rebota tiene amortiguadores débiles.
- Estructura o marco: Moja las llantas y maneja en línea recta sobre concreto, las huellas deben mostrar dos líneas rectas, no cuatro.