La multinacional de neumáticos para automóviles participó en el récord de velocidad terrestre para un vehículo eléctrico en la categoría menos de 1.000 kilogramos. El logro se realizó en conjunto con el equipo Drayson Racing Technologies, con una velocidad máxima de 333,23 kilómetros por hora.
Según informó Michelin, este récord mundial se logró tras dos intentos, y resaltó que el vehículo montaba el modelo de neumáticos Endurance LM P1, el mismo que equipó Audi durante la pasada edición de las 24 Horas de Le Mans.
La corporación gala resaltó que el prototipo de eléctrico de Drayson Racing para Le Mans; el Drayson B12 69/EV, batió la plusmarca anterior de 285,6 kilómetros por hora en el aeródromo británico de Elvington, situado cerca de la ciudad de York, Inglaterra.
La firma indicó que estos neumáticos fueron diseñados especialmente para su utilización en vehículos de altas prestaciones en carreras de resistencia, y desarrollados en colaboración con equipos del Campeonato del Mundo de Endurance.