A fin de año se pondrá en venta en Europa el nuevo Kia Soul 2017 que la marca coreana acaba de develar en el Salón de París. Se trata de una actualización de mitad de vida, que suma equipamiento, nuevos elementos de diseño y cambio de motorización.
El modelo mantiene la base de la segunda generación lanzada en 2014, con 4,14 metros de largo y su diseño cuadriforme único, que mezcla rasgos de hatchback, de monovolumen y de SUV.
En lo estético no hay demasiados cambios. Nueva parrilla y parachoques delanteros, nuevas ópticas, luz diurna LED, nuevos colores de carrocería y algunos elementos nuevos en la zaga.
En el interior se eleva la calidad percibida en materiales de puertas y consola central, donde además se suma una nueva pantalla táctil entre 5 y 8 pulgadas, desde donde se maneja un sistema de infoentretenimiento compatible con Apple CarPlay y Android Auto, con cámara de retroceso, park assist y alerta de tráfico cruzado, entre otros.
En Europa, el Soul se ofrece con dos bloques de 1.6 litros: un turbodiésel CRDi de 128 hp y un gasolinero GDI de 132 caballos, que se suma al Soul eléctrico. Ahora se agrega un nuevo bloque 1.6 Turbo GDI con 204 Hp y 265 Nm de par, asociado a una caja automática de doble embrague y 7 marchas, para ofrecer un 0-100 km/h en 7,5 segundos y una velocidad máxima de 196 km/h.
Este motor viene incorporado en un paquete específico que incluye suspensión deportiva, frenos de mayor tamaño, llantas de 18 pulgadas y una estética deportiva que incluye detalles en rojo, doble salida de escape, y asientos deportivos tapizados en cuero con prespuntes naranjo, entre otros.
Es posible que veamos el nuevo Soul antes de fin de año en Chile, aunque no es nada claro que también arribe esta deseable versión deportiva.