Aston Martin no estuvo en el último AutoShow de París, básicamente porque no tenía nada nuevo que mostrar. Sin embargo, en las mismas fechas se presentó en el Mónaco Yatch Show, donde exhibió el último de sus diseños: el AM37, su primera lancha fuera de borda.
Diseñado por centro de estilo de Aston Martin, al mando del director creativo Marek Reichman, autor de todos los últimos diseños del fabricante, este nuevo bote tiene 11 metros de eslora y está construido con una mezcla de elementos como la fibra de carbono y aleaciones ligeras, dejando la madera para la cubierta. Será fabricado por Quintessence Yatch, en conjunto con el mismo equipo que fabricó el One-77 y el Vulcan.
La cabina de mano parece sacada de alguno de los deportivos de Aston Martin, incluyendo un puesto de conducción personalizado con una confortable butaca independiente, un volante achatado forrado en cuero, un cuadro de instrumentos digital y una gran pantalla táctil dispuesta en forma vertical.
Hay un segundo asiento de acompañante y un sofá amplio justo por detrás, que permite llevar otras seis personas cómodamente sentadas. Entre sus sofisticaciones destaca un sistema de ancla electrónica, climatizador, refrigerador y una máquina para café, todo ello controlado a distancia incluso desde fuera del bote.
Toda la cabina dispone de un techo flotante de fibra de carbono como cobertor, que se guarda bajo la cubierta trasera de manera automática.
Como tenía que ser viniendo de Aston Martin, el AM37 es un verdadero súper deportivo diseñado para surcar los mares. La motricidad está a cargo de dos propulsores Mercury a gasolina, cada uno con 520 caballos de fuerza para 1.040 Hp totales, que le permiten alcanzan una velocidad máxima de 50 nudos o 92 km/h.
Bajo esta versión tope de gama S habrá una variante normal con dos mecánicas distintas: por un lado, dos motores Mercury con 430 Hp cada uno (860 Hp), o dos bloque diésel de 270 Hp (740 Hp). En ambos casos, la velocidad máxima es de 45 nudos o 83 km/h.
Aston Martin AM37
