FNR es el acrónimo de Find New Roads, un slogan que solo podemos asociar a una marca, Chevrolet.
El FNR apareció hace unos años atrás en Shanghái, como un radical conceptual de la casa del corbatín, un modelo que básicamente luce como si Batman le hubiese encargado a Hot Wheels el diseño de su batimovil: radical.
Pero el FNR ha evolucionado en el FNR-X donde como es natural, la X hace alusión al formato crossover. Y es lógico, puesto que con los SUV son el formato de moda y el que más se ve por estos días en Shanghái. Y Chevrolet, siendo una de las marcas con más peso en el mercado local, no puede desteñir ante las visitas.
El FNR-X es el proyecto más ambicioso salido del departamento técnico asiático de GM y apunta hacia un futuro crossover compacto que emplee un tren motriz híbrido/enchufable basado en los desarrollos del Volt.
Su estilo es moderno, pero claramente identificable como Chevrolet, incluyendo algunos guiños al Camaro, como son los focos y el diseño de la parrilla frontal. Ya que mencionamos los focos, estos llevan cierto diseño inspirado en la tradición china del machihembrado en la carpintería. Otros detalles estéticos contemplan puertas suicidas de apertura automática, para un efecto más dramático.
El Chevrolet FNR-X incorpora un tren motriz híbrido/plug-in con dos modos de manejo, Versatility y Sport, más opción de poder usar solo el motor eléctrico o el de combustión. Además, se puede alterar la altura de la suspensión con un esquema adaptable de despeje. El tren motriz se acompaña de algunos adelantos en aerodinámica, como son una parrilla de lamas ajustables que se abren o cierran según la demanda de refrigeración o de aerodinámica, además de spoilers y faldones activos y navajas activas incluso en las ruedas para reducir la resistencia al rodado.
El interior del FNR-X se inspira en el diseño de los cristales de grafeno, incluyendo formas hexagonales y nuevos materiales para los asientos, los que se pueden deslizar o plegar para generar nuevos compartimientos. Ambientan el habitáculo luces decorativas y pantallas táctiles de OLED, donde se encuentran las interfaces del sistema de infotainment, que además cuentan con comando y control por voz. Y como si esto fuera poco, en Chevrolet ya estudian con este concepto, programas para manejo autónomo con soporte predictivo de rutas y un proyector head-up display panorámico.
Muchos de estos adelantos probablemente no los veamos en el corto plazo, pero es interesante ver la visión que Chevrolet hace sobre el futuro automotriz, especialmente en un mercado tan activo y que le viene tan bien como es el de China.
