Al tratarse de año especial, el Museo Enzo Ferrari elogia el natalicio de Enzo Ferrari con una extraordinaria exposición de fotografías que relatan la vida de este personaje de la industria del automóvil.
"Nunca agaches la cabeza, mira siempre bien alto ganes o pierdas".
Fue el 18 de febrero de 1898, el día en que Alfredo Ferrari y Adalgisa vivieron el nacimiento de su hijo Enzo Anselmo Ferrari en Módena, Italia. Bastó que este niño diera sus primeros pasos y palabras, para descubrir la pasión desenfrenada por los motores, misma que fue heredad por su padre, quien tenía un taller.
Quien pensaría que este amor por los automóviles lo llevaría a ser el fundador de un gran fabricante de súper autos y en uno de los personajes más representativos de la industria automotriz mundial y en uno de los más influyentes del siglo XX.
"Eso que llamamos destino, está en una gran parte en manos de los hombres, cuando estos tienen ideas claras y propósitos firmes".
“Parece increíble que Enzo Ferrari naciera en el siglo XIX”, afirma el Presidente y Consejero Delegado Sergio Marchionne. “Su enseñanza es más actual que nunca y su modernidad absoluta. Era un hombre con capacidad de visión, tenía un don fuera de lo común para gestionar los recursos y las personas, además de un gran espíritu emprendedor y un valor extraordinario. Me pregunto qué no habría podido lograr si hubiera tenido a disposición los medios técnicos y los conocimientos de hoy día. La profunda huella que ha dejado en el mundo es motivo de orgullo para todos nosotros de Ferrari y para toda Italia.”
"Cuando usted compra un Ferrari, está pagando por el motor. El resto se lo doy gratis".
Para celebrar los 120 años del nacimiento de Ferrari, en la casa natal de Enzo, en el complejo donde se halla el Museo Enzo Ferrari de Módena, fue creada una exposición de fotografías que lo retratan en diferentes etapas de su vida: desde la infancia a la edad adulta, recorriendo su carrera de piloto, de manager y constructor, junto a legendarios campeones del automovilismo como Nuvolari, Castellotti y Villeneuve.
"Vencer es bello, pero combatir es mucho mejor".
