Lo que señalaré a continuación a muchos les va a sonar como discurso repetido y tiene que ver con todos los clichés que han hecho de este subnicho de crossovers tan apetecido. No importa si hablamos del segmento generalista, con autos como el Hyundai Kona, el Toyota C-HR, el Subaru XV, el Renault Captur o el Citroën C3 Aircross y de modelos como el Audi Q2 y el Mini Countryman. Todos apelan a ser rebeldes, distintos, interconectados, espaciosos, para gente moderna. El "crossover de millenial" se toma las calles cada vez más, aunque muy pocos conducidos por ellos mismos, al menos en Chile, donde siguen siendo modelos de elevado valor, para un público algo más adulto y consolidado económicamente y que podrían tratar de querer jugar con los códigos onderos de un público más joven.
Colores alegres, estilo, cierta cuota de versatilidad en un auto que trata de ser por partes iguales deportivo y utilitario, resulta finalmente en un formato que se jacta de rebelde y único, pero donde todos terminan siendo el mismo auto. La única manera de triunfar será que cada auto no reniegue de la identidad de la marca para ganar adeptos y no perderse entre los estereotipos del segmento y de esto tambien dependerá el éxito que tenga la tardia llegada del nuevo X2 de BMW a un espacio que ya se mueve bastante.
El BMW X2 2018 es un auto con ciertos rasgos bastante atractivos y que hace gala de todos los últimos trucos que hacen que un BMW le entre por los ojos a cualquiera. La presencia ancha, muscular, una mirada agresiva, los tubos de escape doble con 90 mm de diámetro y el perfil fluido con parabrisas estirado y techo caído, que en este caso busca acusar una referencia hacia modelos como el X4 y el X6, así como los modelos GT y Gran Coupé de BMW, logrando un coeficiente de arrastre de 0.28 Cd. Es notable el hecho de que, aunque el auto parece achicarse en las ventanas de las plazas traseras, la distancia a lo largo de las butacas es más larga que adelante.
Sobre las medidas, el X2 contempla 4.360 mm de largo, 1.824 mm de ancho, 1.526 mm de alto y una distancia entre ejes de 2.670 mm, además de un maletero de 470 litros de capacidad. Se fabrica en Alemania, con su hermano de plataforma, el BMW X1.
El X2 debuta tres nuevos colores: Sunset Orange, Misano Blue y Galvanic Gold
Otros detalles que apelan a la tradición son ambas insignias en el pilar trasero, reminiscentes de algunos coupé del pasado de la marca, como queriendo insinuar que BMW no se olvida de su legado y que hace bastante no veíamos en los modelos más contemporáneos. Claro que nos falta hablar de la parrilla invertida (más ancha en la parte inferior de los riñones) y la zaga, mucho más minimalista en el portalón, relegando la patente al parachoques, donde tenga menos protagonismo. Estos dos elementos de diseño son inéditos en el lenguaje de la marca y se agradecen, especialmente cuando se le acusa a BMW de ser un tanto repetitivo.
El interior es un lugar donde cualquier fan de BMW se sentirá en casa. No hay nada nuevo bajo el sol, salvo quizás materiales más suntuosos (como la mezcla entre microfibra y Alcántara que tapiza las puertas y asientos) y alegres insertos con iluminación LED ambiental ajustable, que le entregan un carácter único al habitáculo. Como siempre, la postura al volante es cómoda e invita a conducir.
Tecnológicamente hablando, el X2 presenta una gran pantalla para su sistema multimedia Connected Drive y algunos añadidos extra como opcionales, incluyendo el Traffic Jam Assistant que facilita la carga de trabajo durante el manejo en vías congestionadas y el Parking Assistant que ayuda al usuario a identificar lugares libres para estacionar y maniobrar el vehículo. Aparte del clúster con diseño black-out, el equipamiento sabes que será muy completo, por lo que hablar de cosas como encendido automático de luces (LED), techo panorámico, climatizador electrónico o comandos al volante, está de más.
Lo que no está de más es la seguridad. Por lo mismo, el X2 contempla frenos ABS con control dinámico de frenada, secado de frenos y compensación por fade, control dinámico y automático de tracción y estabilidad, diferencial de bloqueo electrónico, modos de manejo, control de estabilidad para remolque y suspensión ajustable, así como 6 airbags, 5 cinturones de 3 puntas y monitor de la presión en los neumáticos.
El X2 llega a Chile en dos versiones, sDrive 20i y xDrive 20d. El primero ofrece un motor de 2 litros TwinPower Turbo con 192 Hp y 280 Nm de torque (el motor del MINI Countryman Cooper S), asociado a una transmisión automática Steptronic de 7 velocidades con doble embrague. La segunda oferta corresponde a un propulsor Turbodiésel de 190 Hp y 400 Nm de torque, acoplado a un sistema de tracción a las cuatro ruedas y a una transmisión automática de 8 velocidades. Ambos modelos se comercializarán con el paquete M Sport X, que incluye llantas de 19", guarniciones en color grafito en el exterior y un spoiler M deportivo, sin olvidar que el bodykit (faldones, parachoques) son de diseño distinto para las líneas M Sport que para el nivel normal.
Los precios para el BMW X2 comienzan en los $29.990.000, un valor un tanto elevado si nos preguntan a nosotros y que BMW tendrá que evaluar que tan bien le funciona versus a su competencia, el MINI Countryman, el Mercedes GLA, el Audi Q2, el Infiniti QX30, el Jaguar E-Pace y el Volvo XC40.
Galería de BMW X2 2018 Ir a la galería
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The first-ever BMW X2. Be the one who dares.
