Desde la llegada del Common Rail y su asociación con el turbo los motores gasoleros dieron un salto impresionante, pero desde hace un tiempo comenzaron a enfrentarse a algunas dificultades en forma de normativas anticontaminación. Puntualmente, desde la llegada de la Euro 5 se sumó el famoso filtro de partículas y surgieron algunas dudas. Y ahora algunos motores agregan un catalizador denomindo SCR que funciona con un líquido conocido como AdBlue. ¿Hay que preocuparse?
Filtro de partículas, DPF o FAP
Los usiarios de gasoleros tienen una nueva preocupacióncon el filtro de partículas, acá Thomas Burguete, Gte de MKT Estratégico de @citroenarg te explica por qué no tenés que preocuparte. pic.twitter.com/tcxgSiLMBI
— Autocosmos Argentina (@autocosmos_ar) 27 de abril de 2018
Ya te hablamos de este catalizador cuya función es capturar el hollín o partículas que despide el escape de los motores diésel. Al ser un “agente de retención” el DPF se “llena” y necesita limpiarse en un proceso que conocemos como regeneración.
Para limpiarlo se necesitan altas temperaturas que se alcanzan, por ejemplo, con un breve viaje de 10 a 20 minutos a velocidades constantes. Si esto no sucediera, entonces se realiza una breve post inyección para que el combustible se queme en el filtro calentándolo. Marcas como Citroën, además, agregan un aditivo llamado cerina que permite lograr la regeneración a 450ºc en lugar de a 550ºc. La marca francesa comenta también que sus FAP pueden durar entre 180.000 y 200.000 km.
AdBlue y SCR
Así funciona el sistema de limpieza de gases de los motores HDi de @citroenarg como la Spacetourer que incluye AdBlue. Se recarga cada 22.000 km y un filtro de partículas dura alrededor de 200.000 km. pic.twitter.com/jKFqAtwdVZ
— Autocosmos Argentina (@autocosmos_ar) 26 de abril de 2018
El SCR es un catalizador de reducción selectiva destinado a atacar los óxidos de nitrógenos. Para cumplir su meta se utiliza una solución acuosa con urea conocida masivamente como Adblue que se inyecta en el SCR produciendo una reacción química que transforma el NOx (o la mayoría) en nitrógeno y agua.
Esta tecnología se desarrolló para cumplir con normas como la Euro 6 ya vigente en el Viejo Continente, y o las de EE.UU. que siempre fueron mucho más estrictas respecto de las emisiones de NOx.
¿Necesita cuidados especiales?
La respuesta es sí, pero no tanto. Para que te hagas una idea, tomamos como ejemplo a los Citroën Spacetourer y Jumpy que ya incluyen esta tecnología. En este caso, su depósito de 22 litros de AdBlue necesita ser recargado cada 20.000 a 22.000 km con avisos al conductor a cada 600 km a partir de 2.400 kilómetros antes de agotarse.
Si bien, por el momento no hay surtidores de AdBlue en todas las estaciones de servicio, ya comenzó a extenderse su distribución con proveedores reconocidos como Total.