Tras seis décadas sin carreras en el país helvético, la Formula E trajo de regreso la emoción de una competencia a los fieles seguidores del motorsport en Suiza. Como siempre, una carrera entretenida y llena de giros, donde Lucas Di Grassi llevó su Audi hasta la punta, en este primer ePrix de Zurich, siendo también su primera victoria en este campeonato. Fue seguido por Sam Bird (DS/Virgin) en la segunda plaza, recortándole puntos en el campeonato a Jean-Eric Vergne (Techeetah) quien la tuvo muy difícil en la clasificación y que, gracias a su manejo agresivo, logro remontar, sobreponerse a los obstáculos y salvar un punto en la décima plaza para conservar el primer lugar de la general, manteniendo una distancia de 22 puntos con el de DS.
Inédito también es el tercer lugar de Jerome D'Ambrosio, la mejor posición que ha logrado el Dragon Racing en esta temporada.
La carrera no estuvo exenta de contactos, como un golpe entre Daniel Abt (Audi) y Nelson Piquet (Jaguar), así como un toque entre Vergne y Edoardo Mortara, que terminó con el local, retirándose de la carrera. La cantidad de escombros en la pista, obligaron a una bandera amarilla, la cual todos los pilotos aprovecharon para hacer su cambio de monoplaza. Así fue como Di Grassi logró consolidar su distancia tras haber adelantado a Andre Lotterer (Techeetah) y Mitch Evans (Jaguar).
Violaciones en la velocidad permitida con la pista en bandera amarilla, para 5 pilotos, hizo que al final toda la grilla se revolviera de manera notable, perjudicando los avances de Vergne y también los de Lotterer, Evans, Sebastian Buemi (Renault) y José María "Pechito" López. Esto permitió finalmente consolidar el podio de Sam Bird, de Jerome D'Ambrosio y claramente el primer lugar de Lucas Di Grassi.
Vergne y Bird se las verán de nuevo, para un final de miedo, el 14 y 15 de julio en las calles de Nueva York, el cierre de esta temporada de Formula E.
