Si hablamos de Mercedes, no es difícil pensar en un auto espectacular. Pongamos por ejemplo a la Clase S, por mucho tiempo, el estándar con el que aún se mide el segmento de lujo ejecutivo. Pero para una empresa como la de Stuttgart, es más sencillo esperar algunos años y poner toda la carne a la parrilla en un auto cuyo valor tiene muchos ceros, porque sabemos, hay clientes fieles, que ya comprando el modelo actual, están esperando el nuevo y no tienen presupuesto límite para configurarlo. Es un trabajo delicado, pero en Mercedes están acostumbrados. Sin embargo, el Clase A es otra cosa.
Después de dos generaciones tratando de apuntar hacia los monovolúmenes urbanos, en Mercedes fueron más sensatos y se fueron por los rivales que siempre tuvieron que atender, como el Audi A3 y el BMW Serie 1. Y es que el segmento de acceso entre las marcas premium se disputa mucho y se juzga mucho también. Es un desafío mayor hacer un auto más asequible pero que no deje de ser por ningún momento digno de la insignia que lleva en frente. De un A3 y un Serie 1, esperamos emociones similares a las de un A4 o A6 y un Serie 3 o Serie 5, además que las marcas cada vez más quieren dejar ese mal estigma de "aspiracional", o sea el auto que te compraste porque no te alcanzó. Es frívolo, lo sé, pero seamos honestos, también te compras un auto premium por el peso de la insignia, aunque eso lógicamente no te haga mejor persona.
Con la Clase A de Mercedes, en su tercera generación, la vara quedo alta. No solo en accesibilidad, sino porque fuera de algunos detalles puntuales, el auto sigue siendo un Mercedes. Y no solo eso, de paso ayudó a rejuvenecer a la marca, tanto así, que elementos de diseño salieron del Clase A y se viralizaron entre toda la gama. Algo muy difícil de lograr en una marca de linaje altamente tradicional, fue logrado por un solo auto. Mercedes ganó un nuevo aire y se supo reinventar, incluso peleándole ventas a sus rivales alemanes. Y si bien el Clase A no era perfecto, cumplió su cometido a cabalidad.
Teniendo mucho margen para mejorar, al contrario de lo que nos pasa con la Clase S, no sabíamos muy bien que esperar del nuevo Clase A ¿Con que cosa Mercedes nos iba a engolosinar nuevamente, sabiendo que hay un precio como límite?
Madurez... un poquito más
El nuevo Clase A (W177) se emplaza sobre la plataforma modular MFA2 de la marca, orientada a la tracción delantera, pero con soporte para tracción integral y otras fuentes de propulsión. De esta matriz, también se gestarán autos como el Clase A Sedán (a lanzarse dentro de este año), el Clase A Sedán de batalla extendida (solo para China) y otros modelos, como pueden ser el nuevo CLA/CLA Shooting Brake, el GLA y la nueva Clase B, con un modelo SUV intermedio, el GLB.
En esta plataforma se ha puesto mucho énfasis en la rigidez y aislación acústica. Por lo mismo Mercedes ha reforzado todos los puntos de anclaje entre la carrocería y el tren motriz, y ha llegado a extremos como hacer que las mangueras y ductos del agua o de admisión, paneles y componentes interiores del auto, tengan propiedades de absorción acústica.
De diseño, la verdad es que la Clase A anterior fue más impactante, por la época en que fue lanzado, las expectativas que teníamos y lo que era el Clase A anteriormente. En esta etapa, el Clase A se ha vuelto un poco más maduro y minimalista, más puro y, por consiguiente, un poco menos agresivo, salvo quizás su frontal con nuevos focos triangulares y su gran parrilla imponente. Los focos de atrás, sabemos que se parecen a los del Kia Cerato 5 (no podemos obviar estas molestas comparativas de redes sociales), pero la verdad es que es algo que solo le va a doler a los más "aspiracionales". Debemos señalar que el auto se ve más grande (porque es más grande) y gana mucho en vivo, más que en las imágenes, luciendo elegante y distinguido, sin perder jovialidad, pero tampoco dejando de lado algunos rasgos del anterior.
Con respecto a sus medidas, el Clase A contempla 4419 mm de largo, 1440 mm de alto y 1796 mm de ancho (sin contar los espejos). Para que se hagan una idea, la Clase A anterior tenía 4.3 metros de largo, 1780 mm de ancho y 1433 mm de alto, por lo que nos queda claro que ha crecido un poco. Y esto es bueno, porque la Clase A anterior era un auto bastante "claustrofóbico" en las plazas traseras. La maleta también crece en 29 litros hasta los 370 litros del modelo nuevo. Con esto queda claro que la madurez no solo es en estilo, sino que en lograr un auto un poco más práctico que totalmente pasional.
Ahora puedes hablarle al Clase A
Nuevamente Mercedes nos sorprende con un interior de diseño futurista, fresco y con interesantes materiales. Vuelven los tres aireadores tipo turbina en la zona central, pero el torpedo tiene una orientación un poco más hacia el conductor, señalada por una aplicación en color piano black que va desde el conductor hacia la consola central.
La famosa pantalla flotante tipo tablet del Clase A anterior se regenera en una gran pantalla doble y flotante, donde está el clúster digital de instrumentos para el conductor (personalizable completamente) y el nuevo sistema multimedia de Mercedes MBUX, un upgrade que agradecemos enormemente (uno de los puntos flacos del anterior, era su anticuado sistema multimedia), el que se puede operar de manera táctil, con sensores táctiles en el volante, con un comando central, o con el sistema Linguatronic de comandos por voz y que, tal como conocimos con el recientemente lanzado Audi Q8, no tienes que hablarle como robot, más que decir "Hola Mercedes, quiero cambiar la iluminación a color verde" o "Hey Mercedes, hace frio" para que el Clase A haga cosas por ti. Según versión estas pantallas serán de 7 o de 10,25 pulgadas.
Por lo demás, el Clase A ofrece de serie (acabado Progressive) tapicería de cuero símil Artico, asistente de estacionamiento, sistema multimedia con GPS y soporte para smartphones, climatizador dual automático (Thermatic), modos de manejo, sistema Start/Stop, llantas de 17", 7 Airbags, iluminación LED frontal de alto performance, sensor de fatiga, control de tracción y estabilidad, sensor de desgaste de pastillas y de presión en los neumáticos, kit anti pinchazo Tirefit, servofreno de emergencia, iluminación ambiental, control crucero con limitador (Tempomat y Speedtronic) entre lo principal.
El modelo AMG Line cambia la tapicería por un textil símil cuero en microfibra Artico/Dinamica, asientos deportivos, alfombras AMG, llantas AMG de 18" con neumáticos Run Flat, suspensión rebajada y un bodykit especifico AMG. El A250 AMG Line, suma llantas de 19" con neumáticos convencionales (se equipa kit Tirefit) y un programa de amplificación del sonido del escape, para una sensación más deportiva.
Todo Turbo
La colaboración con la alianza Renault/Nissan/Mitsubishi continua presente en el Clase A. De hecho, el motor 1.4 Turbo fue fabricado en conjunto con el grupo e incorpora desactivación de cilindros. En el rango de carga, entre 1.250 y 3.800 rpm, y dependiendo del requerimiento de potencia, las válvulas de admisión y escape del segundo y tercer cilindro se cierran mediante la modificación de apertura de las válvulas. Por lo tanto, los dos cilindros restantes funcionan con cargas más altas y de manera más eficiente. Para minimizar la fricción, las paredes del cilindro se recubren con el proceso patentado Nanoslide. Las faldas del pistón reciben un revestimiento Eco-Tough, un recubrimiento especial de grafito para una fricción optimizada y una alta resistencia al desgaste. Esta planta cuenta con 160 Hp y 250 Nm de torque, asociándose a una caja manual de 6 velocidades o a una 7G-Tronic automática, con cambios al volante y tres modos de gestión (Eco, Sport y Manual).
En el caso del A250, el 2 litros Turbo es completamente de origen Mercedes y entrega 220 Hp y 350 Nm de torque. Todos los modelos cuentan con Dynamic Select, que ofrece tres programas de manejo (Comfort, Sport y Eco), los que actúan sobre la gestión de motor, transmisión, dirección y suspensión (de equiparse algún sistema de reglaje electrónico)
Para el próximo año veremos el debut del A35 AMG (300 Hp), el A45s AMG (420 Hp) y el A200 diésel. Los precios de los modelos AMG deberían rondar entre los 45 y 65 mil dólares aproximadamente.
Asistencias opcionales
Mercedes pone a disposición algunos sistemas de asistencia extra, que ya hemos visto en modelos más grandes. Por ejemplo airbags laterales para las plazas traseras, asistente activo de distancia Distronic, asistente activo de parada de emergencia, un asistente activo para cambio de carril de funcionamiento muy intuitivo, otro asistente activo de punto ciego, además de la dirección inteligente que asiste en carretera, y la tecnología “Stop and Go Pilot” que opera como un asistente de frenado en situaciones de tráfico a baja velocidad, sin olvidar el paquete Plus para el programa Pre-Safe (de serie) que puede activar los frenos del auto, aun después de recibir un impacto, para evitar colisiones en cadena.
“Las nuevas tecnologías tienen que girar en torno a las personas para hacer su vida más fácil y la nueva Clase A de Mercedes-Benz lo hace de diferentes maneras, convirtiéndose así en un verdadero acompañante donde se genera un vínculo a través de la interacción con su conductor. Por ejemplo, el sistema Mercedes-Benz User Experience responde a los requerimientos del usuario a través del control de voz, creando perfiles personales y redefiniendo el concepto de interconexión digital dentro de un automóvil”, asegura Pablo Marcos, product manager senior de Kaufmann en Chile.
Kaufmann, histórico representante de Mercedes en el país, pretende colocar 400 unidades del Clase A de aquí a fin de año, a las que de seguro se sumaran las del Clase A Sedán, a debutar este año también.
Versiones y precios
Versiones |
Precios de lista (Agosto 2018) |
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A200 Progressive 1.4 Turbo 6MT | $18.990.000 |
A200 AMG Line 1.4 Turbo 6MT | $20.490.000 |
A200 AMG Line 1.4 Turbo 7AT | $22.490.000 |
A250 AMG Line 1.4 Turbo 7AT | $24.990.000 |
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