Pocas semanas después de su presentación regional realizada en Cuzco (Perú) del Jeep Cherokee 2019, llega la actualización de mitad de vida de la actual generación del SUV mediano de la marca, que arriba directamente desde Estados Unidos.
El Cherokee recibió un facelift exterior, destacando una parrilla menos acuñada, nuevos parachoques y capó, y grupos ópticos Full LED en una sola unidad. En la zaga, en tanto, se rediseñaron el portalón y las luces (LED) y se añadieron algunas decoraciones cromadas.
En conjunto con las llantas de nuevo diseño (17 y 18 pulgadas) y los rieles en el techo, el resultado es un Cherokee con look más moderno y elegante, decididamente alineado con el estilo de Grand Cherokee y Compass.
También hay mejoras de diseño y construcción interior, especialmente en la consola central, que creció en tamaño para ofrecer más espacio para dejar cosas, y meter en el tablero un nuevo sistema de infoentretenimiento.
La marca indica que también se ganó espacio tanto en las plazas traseras como en el maletero.
Los paquetes mecánicos siguen siendo los mismos, pero mejorados. De entrada en la variante Longitude estará el mismo bloque de cuatro cilindros 2.4 litros Tigershark del Compass, pero con 184 caballos de fuerza y 231 Nm de par, asociado a una caja automática de nueve velocidades y tracción delantera.
Las versiones Limited y Trailhawk usarán el V6 3.2 litros Pentastar con 271 caballos de fuerza y 313 Nm de par, asociado a la misma caja de nueve marchas y a un sistema de tracción total.
En el caso de la variante Limited, se trata del Active Drive I, que opera de manera automática, enviando el par desde el eje delantero al trasero según las necesidades de conducción. La Trailhawk monta el sistema Active Drive Lock, que incluye una reductora, bloqueo de diferencial trasero y el sistema de control Select-Terrain, con cinco ajustes preconfigurados (automático, nieve, deportivo, arena/barro y rocas).
En cuanto a equipamiento, hoy se ofrece de serie el sistema U-Connect con pantalla de 7” y conectividad a Apple CarPlay y Android Auto, cuatro puertos USB (1 para carga), display digital de 3,5”, sistema keyless con botón de encendido, freno de mano eléctrico, climatizador bizona y sensor de retroceso con cámara, entre lo más destacado. En seguridad, todos los Cherokee vienen con siete airbags (incluyendo uno para las rodillas del conductor), controles de estabilidad y tracción, asistente de partida en pendiente, sistema de frenos ABS con EBD, monitor de presión de neumáticos y mitigación electrónica antivuelcos, entre lo principal.
La versión Limited añade a eso llantas de 18”, asientos delanteros eléctricos y calefaccionados, tapiz de cuero, luces automáticas, sensor de lluvia, display digital de 7”, espejos plegables, portalón eléctrico y con sistema manos libres, sistema de encendido remoto, pantalla U-Connect de 8,4” y sunroof eléctrico.
Finalmente, el más radical Trailhawk no sólo muestra un diseño diferenciado, con protecciones bajas, sistema de ganchos para arrastre y costuras rojas en el interior, sino que suma un completo paquete de seguridad que incluye aviso de cambio involuntario de carril, control crucero adaptativo, aviso de colisión frontal con freno de emergencia, control de descenso, selector de velocidad off-road, asistente de estacionamiento y navegador GPS, entre otros.
Por ahora, Jeep tiene en venta las variantes Limited y Trailhawk, ambas con el motor V6 y tracción 4x4, y precios de lista de $27.490.000 y $32.490.000, aunque se ofrecen bonos de marca y financiamiento de hasta $2,5 millones.
En pocas semanas más se sumará la versión de entrada Longitude 4x2, que tendrá un precio de lista de $20.490.000, con un precio de llamado incluyendo todos los bonos de $17.990.000.
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