General Motors ha dado a conocer una inversión de $150 millones de dólares en la planta Flint Assembly con el objetivo de aumentar la producción de sus pickups de Heavy Duty, es decir, la Chevrolet Silverado y también la GMC Sierra.
De esta manera, GM suma en un corto tiempo, dos expansiones en su capacidad de fabricación, la anterior fue por medio de los pickups full-size en la planta de Fort Wayne, Indiana,
Desde 2013, General Motors ha invertido más de $1,600 millones de dólares en la planta Flint Assembly, lo que permite un aumento en la capacidad de producción de las nuevas camionetas Chevrolet y GMC HD en unos 40,000 vehículos al año, incluidos más modelos de cabina doble y motores diésel.
Además, este año dicha fábrica aumentó con 1,000 empleados plantilla de trabajadores, lo que permite llegar a más 5,000. Dentro de esta nueva inversión, se buscará mejorar los transportadores de la planta y otras herramientas para aumentar la capacidad de producción a partir del primer semestre de 2020.
Cabe citar que las ventas combinadas de la GMC Sierra 1500 y la Chevrolet Silverado 1500, el modelo de mayor volumen en el ferozmente competitivo segmento de pickups de tamaño completo, aumentaron un 20 por ciento en el primer trimestre de 2019 en comparación con el año anterior. Ante este panorama, GM está proyectando otro aumento significativo para el segundo trimestre.