Volvo Cars y Geely -fabricante chino propiedad de la marca sueca- tienen la intención de fusionar sus operaciones de motores de combustión existentes en un negocio independiente con el fin de establecer un nuevo proveedor global que buscará desarrollar motores de combustión interna y sistemas híbridos.
Con este esquema, Volvo Cars podrá enfocarse plenamente en su plan de desarrollar una gama de modelos totalmente eléctricos. A mediados de la próxima década, se espera que la mitad de sus ventas globales sean de vehículos 100 por ciento eléctricos y la otra mitad híbrida, suministrada por un sistema de nueva generación.
Para Geely, la nueva entidad productora de motores permitirá que sus otras marcas: Geely Auto, Proton, Lotus, LEVC y LYNK & CO dispongan de modelos con motores de combustión eficientes, tecnológicamente avanzados y motores híbridos. Este nuevo negocio independiente también podría convertirse en un proveedor de otros fabricantes, proporcionando posibles oportunidades de crecimiento.
Tanto Volvo como Geely están en el proceso de dividir sus operaciones de motores de combustión interna en nuevas unidades dentro de sus respectivas organizaciones, como un primer paso hacia la fusión de los dos en un nuevo negocio independiente combinado.
Volvo Cars cree que la electrificación de la industria automotriz será un proceso gradual, lo que significa que habrá una demanda continua significativa de trenes de potencia híbridos eficientes junto con ofertas totalmente eléctricas.
Los planes detallados de la nueva empresa están en desarrollo y sujetos a negociaciones sindicales, así como a las aprobaciones de la junta y las autoridades pertinentes.
