El Grupo PSA está decidido a electrificar su gama de productos en todas sus marcas, incluyendo, por supuesto, el segmento de vehículos comerciales, donde es muy competitivo con sus marcas Citroën, Opel y Peugeot.
Si bien desde hace años cuenta con variantes eléctricas de los furgones Citroën Berlingo y Peugeot Partner, los que incluso se lanzaron en Chile, este año ha anunciado nuevas versiones electrificadas para los modelos grandes, Citroën Jumper y Peugeot Boxer, los que se comercializarán en Europa desde principios de 2020.
Y como si eso fuera poco, Citroën anuncia ahora una verdadera "ofensiva eléctrica" de su gama comercial, ya que la marca pretende reforzar su oferta eléctrica destinada a profesionales con una gama de furgones 100% electrificada en 2021. Así, en dos años llegará una versión 100% eléctrica de Jumpy (en 2020) y una versión 100% eléctrica del nuevo Berlingo Van (en 2021). Esta electrificación, dice la marca, afectará a los vehículos comerciales de carga, pero también a las versiones destinadas al transporte de pasajeros.
El primero de los nuevos modelos eléctricos en llegar al mercado será el Citroën Jumper, cuya nueva variante sin emisiones fue presentada en el último Salón de Vehículos Comerciales de Birminham, proponiendo para principios de 2020 dos opciones de tamaño: L1H1 y L2H2, con 8,0 y 11,5 metros cúbicos de capacidad de carga, para lanzar más adelante opciones de carrocerías L3 y L4.
El modelo se producirá en Italia y recibirá una conversión por parte del especialista BD Auto, incorporando un motor eléctrico alimentado por dos opciones de baterías, de 44 kWh y 62 kWh, para una autonomía de 225 y 275 kilómetros, respectivamente.
Respecto de la Jumpy eléctrica, se producirá en Francia en conjunto con Peugeot Expert y Opel Vivaro. Citroën indica que fue desarrollado sobre la plataforma multi-energía EMP2 del Grupo PSA, y llegará con 2 niveles de autonomía "que darán una nueva dimensión al confort de Jumpy y reforzarán la tranquilidad de uso de sus conductores". Por una parte, dispondrá de una batería de 50 kWh para ofrecer 200 km en ciclo WLTP, mientras que la batería de 75 kWh extenderá el rango a 300 kilómetros.
Si bien no ha entrado en detalles, Citroën indica que los volúmenes de carga útil serán idénticos a las versiones con motor convencional.