¿Qué hay de nuevo para el 2020?
No parece mucho, pero hay algunas cosas notables. Por ejemplo, la máscara frontal cambia su entramado y tiene un labio más curvilíneo. La toma de aire inferior tiene un diseño evolucionado, mientras que los neblineros pasan a los costados, en dos encastres que simulan ser tomas de aire. También se retocan las llantas y la gama de colores, con un nuevo Rojo Perlado.
En su exterior, los modelos GLX que antes llevaban luces de xenón, ahora llevan iluminación LED, más eficientes.
Puertas adentro, no hay cambios en la configuración de seguridad o de equipamiento, pero el tapiz fue renovado, al igual que la cámara de retroceso en las versiones GLX. Probablemente lo que más notarás, es que ahora el Baleno lleva un nuevo sistema multimedia de panel táctil, pero con soporte Apple CarPlay/Android Auto en todas sus versiones, saldando una eterna deuda que tenía el modelo anterior, al igual que todos los Suzuki.
Recordar, Baleno ofrece dos niveles de equipamiento: GLS con frenos de tambor traseros, dos airbags, aire acondicionado, computador a bordo, volante multifunción forrado en cuero, espejos y alzavidrios eléctricos, entre lo principal. El modelo GLX gana frenos de disco traseros, seis airbags, climatizador, spoiler, espejos exteriores con intermitentes, control crucero, volante regulable en profundidad y botón de encendido.
Lo demás, no se toca
El motor del Baleno sigue siendo el 1.4 VVT de 16v con 91 Hp y 130 Nm de par, asociado a transmisiones manual de cinco velocidades o automática de cuatro. El rendimiento mixto queda entre los 18,5 km/lt (MT) y 17,4 km/lt (AT) según homologa el 3CV, cifras que también son una ventaja de este modelo.
Tampoco hay cambios en las dimensiones, considerando un maletero de 355 litros y una distancia entre ejes de 2.520 mm, con un largo general que no alcanza a sobrepasar los cuatro metros.