A lo largo del tiempo, el mundo motor les ha puesto apellidos distintos a los autos con el fin de poder clasificar sus prestaciones. Uno de esos subgéneros, es el de los llamados "grand tourer" o "gran turismo". Informalmente, podemos describirlos como autos con motor frontal muy potente, una puesta a punto deportiva pero que permite cierto grado de confort, espacio para dos ocupantes y en algunos casos, con asientos "de cortesía" en la parte de atrás (los famosos 2+2), con un diseño exterior poco exuberante, más bien elegante, pero con ciertas dotes atléticas. Son autos para recorrer grandes distancias, por caminos revirados en un ambiente confortable, en los que se puede alcanzar grandes velocidades y que aún así permiten una conducción placentera para quien va al volante. Obviamente, con el tiempo, estos modelos han ido quedando un poco en el camino, conforme los formatos de auto han ido cambiando y son pocos los que se pueden tildar como verdaderos exponentes. Un BMW Serie 8, un Bentley o un Aston Martin son opciones más puristas. Un Porsche también puede hacer la tarea, aunque lleve el motor atrás. Un Lamborghini, no podría ser jamás considerado como un gran turismo, en el sentido tradicional de la palabra.
Y ahora, McLaren toma el desafío con su propia propuesta, el cual directamente han llamado como GT; un grand tourer a-lo-McLaren.
Este GT toma como base la plataforma del 720S, como lo delata su distancia entre ejes de 2.670 mm, pero es un poco más largo, con 4,68 metros. Su motor, un V8 biturbo de cuatro litros, también es tomado prestado del 720S, pero los turbos han sido modificados para que su potencia de 612 Hp y 630 Nm de torque sea encontrada a más bajas revoluciones, lo que lo hace un auto mucho más cómodo y disfrutable para el uso que se le dará, en contraste con el espíritu pistero de sus hermanos, donde hay que ir más alto de vueltas. El GT alcanza los 100 km/h en 3,5 segundos, los 200 en 9,5 segundos y luego, una velocidad punta de 326 km/h, así que lento y poco reactivo, no es.
Con respecto a lo anterior, es justamente lo que McLaren quiere ofrecer con el GT, un modelo que hace concesiones para adecuarse a un formato más confortable, pero que sigue siendo el más ágil y deportivo de los gran turismos. Esto se nota en su diseño más recatado, en la elección de colores del interior o en su gran cúpula acristalada (opcional), la que incluso cuenta con un techo electrocromático. Pero no nos olvidemos, sigue siendo un McLaren, así que puertas adentro no encontrarás sillones de castillo o madera como en un mueble antiguo. Aquí es todo luz, espacio y minimalismo, pero con los mejores cueros y verdadero aluminio; lujo moderno.
El McLaren GT cuenta con tres acabados: Standard, con interior en cuero Nappa negro; Pioneer, interior negro o burdeo en Alcántara y cuero; Luxe, el cual posee seis opciones distintas, todas ellas en cuero Softgrain Aniline. Entre otras opciones se encuentran: asientos con ajuste manual o eléctrico, si los asientos están calefaccionados o si se equipa iluminación ambiental. También se pueden elegir packs especiales con detalles cromados (MSO Bright Pack), en negro (MSO Black Pack) o de fibra de carbono, que visten el splitter delantero, el parachoques, el difusor trasero y las carcasas de los retrovisores. Y claro, no podemos olvidar el sistema de audio opcional de 12 parlantes firmado por Bowers & Wilkins.
Un Gran Turismo no está completo sin espacio para llevar algún que otro bolso. Y McLaren se las arregló para que el GT pueda llevar 150 litros en el frente y 420 litros en la parte de atrás, sobre el motor y bajo una cúpula acristalada. Dicha sección fue diseñada para que no se achicharren tus pertenencias con el calor del vano motor y la verdad es que no se notan los 420 litros, por su disposición alargada. Quizás podrás meter un par de esquíes o un bolso con palos de golf más un par de bolsitos en el frente. Definitivamente más práctico que un 720S, pero muy lejos de lo que podrías encontrar en la competencia.
Ya hablamos de su diseño, su interior, su potencia y su capacidad de carga, pero dinámicamente hablando, McLaren además dota al GT con un sistema de amortiguación adaptativa que permite un manejo más versátil y que opcionalmente, puede elevarse unos milímetros para sobrepasar accesos o lomos de toro con mayor confianza.