Así como sucedió recientemente con la X-Trail, Nissan no ha querido descuidar a la regalona de las ventas, la Qashqai. Los cambios, como buen facelift, son generosos y apuntan a distintas áreas del modelo, resultando finalmente en un conjunto mucho más actualizado del que ya conocíamos, claro que con muchos aspectos que se heredan de su hermana mayor.
Por ejemplo, su máscara V-Motion más moderna y refrescada, con un nuevo parachoques más agresivo y con aplicaciones brillantes, le entrega un look más dinámico y actualizado, que se alinea con el estilo de los nuevos productos de la casa japonesa. Esto es válido también para los conjuntos ópticos delanteros y traseros, más nítidos y con incorporación de tecnología LED. El parachoques trasero también ha sido revisado en su parte inferior con unas aplicaciones en color aluminio, las que de seguro podrán incorporarse o no según versión. Nuevas llantas bicolor de 17", 18" o 19" completan el look.
Se suman dos colores nuevos a la paleta: Azul Vivid y Bronce Chestnut.
Hacia el interior es donde se viven los cambios más tangibles, especialmente por las mejoras en terminaciones, materialidad y aislación acústica. Ventanas más gruesas, revisión de gomas y sellos, ayudan a un ambiente mucho más tranquilo. En evidencia queda la consola, de diseño prácticamente idéntico al de la X-Trail, con la excepción de la zona que queda sobre la guantera, con un embellecedor alargado. También destaca el nuevo volante, que ya conocemos del Kicks, más grueso y con fondo plano, que de seguro se irá incorporando a otros modelos de la gama.
En Europa, al menos, se añade una versión extra, tope de línea, llamada Tekna+, la que lleva a la Qashqai a un territorio más lujoso. Prueba de esto, es su nueva tapicería de cuero, con asientos calefaccionados y ajuste lumbar neumático, así como carcazas de aluminio satinado para los espejos y un exquisito sistema de audio Bose con 8 parlantes. Por lo demás, mejora el sistema de infotainment, se rediseñan los asientos con un respaldo más delgado (que permite mayor espacio a las plazas traseras) y se arreglan algunos detalles menores pero que a muchos le son de importancia, como ventanas eléctricas one-touch en todas las puertas.
En Chile seria de esperarse que se mantenga la motorización 2.0 de 140 Hp.
Claro que lo más importante en el Qashqai, es la adición de los programas sami-autónomos ProPilot, consistiendo en la función conjunta del control crucero inteligente, asistente de mantenimiento de carril y piloto automático para tráfico, de modo que el auto, bajo ciertas circunstancias pueda conducirse por sí solo.
Cierran las revisiones, mejoras a la suspensión y anclajes, para un manejo más balanceado.
¿Suena maravilloso no? El gran pero es, cuanto de todo lo que acabamos de mencionar va a incorporarse a la configuración latinoamericana, especialmente el programa ProPilot o algunos elementos de seguridad. Solo el tiempo lo dirá. La nueva Qashqai debutará dentro de poco en Europa, pero a nuestra región de seguro habrá que esperar un poco más.