Luego de que el Gobierno japonés descubriera que Mitsubishi, Nissan y Subaru habían falsificado los informes sobre la economía de combustible y emisiones contaminantes de sus modelos que se venden en su mercado doméstico, ahora ha encontrado que Mazda, Suzuki y Yamaha también son sospechosos de alterar los datos de consumo de gasolina.
Después de una solicitud del Ministerio de Tierras, Infraestructura y Transporte de Japón, se descubrieron inconsistencia en los resultados entregados por Suzuki en 6.401 de los 12.819 vehículos examinados desde 2012. Por su parte, Mazda detectó pruebas incorrectas en 72 vehículos de sus 1.875 unidades desde 2014, y Yamaha encontró siete casos entre las 335 unidades testadas desde 2016.
Cabe mencionar que las pruebas se realizaron sobre muestras de vehículos fabricados seleccionados durante el proceso de garantía de calidad.
Ante esta situación que demerita la imagen de la industria japonesa, que era famosa por su calidad y confiabilidad, Toshihiro Suzuki, Presidente de Suzuki, se disculpó por las acciones de su compañía en una conferencia de prensa: "Es un hecho significativo que una gran cantidad de nuestros productos se procesaron incorrectamente, y lo tomamos en serio. No educamos a nuestro personal de manera exhaustiva".
Por su parte, Kiyotaka Shobuda, Director General Ejecutivo de Mazda, mencionó que no hubo alteraciones deliberadas de los datos, y que las inspecciones incorrectas no afectaron la calidad de los automóviles. "La compañía se toma en serio el incidente y se asegurará de evitar que las inspecciones impropias vuelvan a ocurrir", mencionó el dirigente de la compañía.