Probando el Volkswagen Virtus 2018

En octubre del año pasado se anunció al Virtus, en la plataforma del Polo y como un fuerte contendiente en el segmento de los sedanes, uno que aún es muy relevante tanto en Chile como en Latinoamérica. Así fue como en marzo, el sedán brasilero hizo su debut, para hacerse parte de un segmento donde participaba tímidamente con su anterior iteración “Made in India” y que tal como el Polo de esa generación, no cuajó muy bien por su calidad y equipamiento.

Ahora, con la ayuda de la plataforma MQB, el Virtus volverá a hacerse un espacio en este segmento de sedanes, pero menos exigente que donde pelea el Polo. ¿Le sentarán bien las mejoras?

Dimensiones y diseño

Como la tónica en todos los modelos nuevos, el Virtus creció, casi al nivel del Bora actual. Nada de que preocuparse, puesto que el venidero Jetta también ha crecido, por lo que hay margen para que puedan convivir ambos modelos.

Virtus mide 4.482 mm de largo, 1.751 mm de ancho y 1.468 mm de alto. Si lo comparamos con el Polo, es idéntico en el ancho, levemente más alto (4 mm) y obviamente más largo, con 425 mm de diferencia. También crece la distancia entre ejes, de 2.565 a 2.650 mm.

Contra algunos de sus rivales, por ejemplo, es más largo y ancho que un Toyota Yaris (4.425 mm, 1.730 mm), así como más grande en todas sus dimensiones que un Kia Rio 4 y un Citroën C-Elysee, aunque siendo sinceros, todos los modelos son bastante parecidos. El único que se arranca en largo es el Chevrolet Cavalier, aunque con una batalla y capacidad de maletero inferior. Las ventajas del Virtus están en su distancia entre ejes y su goloso maletero de 521 litros, el más grande del segmento, dejando atrás a su competencia, todos cercanos a los 500 litros (PSA, Honda City, Toyota Yaris, Rio 4).

En el Polo, nos encontramos con que el maletero solamente se podía abrir desde el interior o con el control remoto de la llave. En el Virtus se pierde el botón interior, pero se gana un botón en el portalón. El maletero se puede ampliar, plegando los asientos traseros (60:40)

De estilo, claramente el Virtus es exactamente igual al Polo hasta las puertas delanteras, manteniendo la estampa sobria y familiar a la que nos acostumbra Volkswagen y donde no hay riesgos, menos aún en un segmento tradicional.

Se mantiene el listón de color carrocería sobre la parrilla, que permite bajar visualmente la trompa para un look más deportivo, el perfil cromado en la parrilla que se introduce en los focos y un segundo perfil inferior de la toma de aire que llega hasta los ópticos auxiliares (neblineros y LED, en esta versión). Hacia el perfil, una línea de carácter en forma de flecha, le da dimensión y contenido al sobrio perfil del Virtus, además de que, hacia el final, se funde en la parte superior del maletero, el que imita un discreto spoiler. El tercer volumen se integra de manera muy natural al conjunto, con un techo que cae suave en la zaga sin ser excesivamente aguzado. El maletero presenta luces alargadas, que nos recuerdan un poco a Audi, quizás como una manera de sutilmente darle un look más premium.

Rematan el look, llantas bicolor de 17", aunque claro, hablamos de la versión Limited tope de gama, por lo que las llantas serán más pequeñas en los otros niveles.

Equipamiento e interior

El interior, salvo por un borde en color negro brillante alrededor de la palanca de cambios, es exactamente igual que el del Polo, lo que significa que nos encontraremos con las mismas novedades y los mismos defectos.

El Virtus hace gala de un sistema multimedia que ahora se encuentra al nivel del clúster, algo que no ocurría en otros modelos de Volkswagen y que ya de a poco comenzaremos a ver más frecuentemente. También se conserva el curioso soporte de celular, de serie, sobre el torpedo, muy práctico, aunque de percepción barata. Las aplicaciones y armado, son de muy buena calidad, no así los polímeros utilizados en el habitáculo, todos de tacto duro y de percepción muy económica para lo que se espera en un auto de esta marca.

Para compensar lo malo de los plásticos, en nuestra versión Limited al menos tenemos volante de cuero y asientos de eco cuero bitono, los cuales, como en el Polo, son un poco planos y duros para nuestro gusto, pero de buen aspecto.

La postura al volante es cómoda y te deja todo a la mano. Los asientos de atrás son más bien para 4 que para 5, aunque con mayor espacio para las piernas, lo que nos permite ir más holgados. Hay un puerto USB disponible en las plazas traseras para que tus amigos puedan cargar sus teléfonos, práctico y conveniente en esta era.

Versiones

Tal como su hermano hatchback, Virtus se ofrece en cuatro niveles de equipamiento. El modelo Trendline (base), presenta espejos y alzavidrios eléctricos, alarma volumétrica, computador a bordo "Plus" (la única diferencia versus el Polo), sistema de audio con Bluetooth, USB y 4 parlantes, además de aire acondicionado.

El modelo Comfortline, agrega llantas de aleación de 15", neblineros con función cornering, apoyabrazos delantero, palanca de cambio de cuero (solo 6AT) sistema de audio "Composition Touch" con panel táctil de 6,5", 6 parlantes y soporte App Connect, así como compatibilidad para Apple CarPlay, volante multifunción ajustable en altura y profundidad, además de sensores de estacionamiento delanteros y traseros.

El Highline es prácticamente el modelo tope, con llantas de 16", pack de cuero sintético (pomos, tapices, volante), asistente para arranque en pendientes, levas de cambio al volante (solo 6AT), climatizador automático, cámara de retroceso, control crucero, encendido automático de luces y limpiaparabrisas, focos con función Coming-Home, retrovisor interior electrocromático y acceso Keyless con botón de encendido.

Finalmente, la versión que ilustra nuestra prueba, la versión Limited, exhibe dos grandes innovaciones tecnológicas que son primicia en el segmento, aunque arrancándose peligrosamente en precio. Primero, el clúster virtual Active Info Display de 10,25", inédito en el segmento y que ofrece todos nuestros instrumentos completamente digitalizados. Lo segundo es el poderoso sistema multimedia "Discover Media" con una pantalla táctil de 8" que incorpora comandos por voz a todo lo que ya ofrecen los otros sistemas anteriores y que también pudimos ver en autos como el Golf y el Atlas.

Seguridad

Cortesía de la plataforma MQB, el Virtus mantiene el excelente nivel de seguridad que tiene Polo, especialmente desde la versión Comfortline en adelante. Todas las versiones cuentan con 4 Airbags, frenos ABS, anclajes ISOFIX e inmovilizador electrónico. Desde la versión Comfortline 6AT se añade el sistema de regulación del motor (MSR), control de estabilidad (ESC), control de tracción (ASR) y bloqueo electrónico de diferencial delantero (EDS). Todo esto, hace que el Virtus obtenga 5 estrellas en protección para ocupantes y 5 estrellas en la prueba de impactos con sillas para niño en las pruebas de Latin NCAP, transformándose en uno de los autos más seguros evaluados en Latinoamérica, considerando que además se fabrica en la región. Con 6 Airbags en lugar de 4, nos hubiésemos quedado más conformes aún. Es un punto muy fuerte a considerar, versus algunos de sus rivales, especialmente autos como el Rio 4.

Manejo

El Virtus es motivado por una versión mejorada del EA211. Sus principales modificaciones están en la fabricación de su block en aluminio y que incorpora el colector de escape directamente en su estructura, lo que ayuda a bajar el peso de la unidad motriz en un 30%. Así mismo, el hecho de que cuente con doble árbol de levas a la cabeza y 16 válvulas, mejora su rendimiento en un 10% y reduce las emisiones de CO2 en un 20%. No es un propulsor deficiente, menos en el segmento donde compite, pero estamos claros que lo que la lleva hoy, son los motores Turbo.

Este motor entrega 110 Hp y 155 Nm de par, acompañándose de una caja manual de 5 velocidades o una automática Tiptronic de 6 con modo Sport, que es el caso de nuestra versión Limited.

Y tal como el Polo, la caja automática no es de las mejores, incluso siendo de 6 marchas y considerando que las transmisiones de Volkswagen son bastante eficientes. Aquí ocurre lo contrario, siendo una transmisión poco inteligente para administrar la potencia del motor, ya que a la caja le cuesta saber cuándo es mejor pasar los cambios. De todas maneras, parece ser que en el Virtus se probó un mapa distinto al del Polo, porque a ratos, parecía obedecernos.

Con 110 Hp, el Virtus es uno de los más potentes en el segmento, quizás superado por los 115 Hp del motor 1.6 VTi del Peugeot 301/Citroën C-Elysee. Todos los demás motores andan en el orden de los 100 Hp con motores de 1.4 y 1.5 litros y esto les juega a favor en el consumo, ya que, si los ponemos en una lista, nos encontramos que el Virtus es el más gastador, con 10,1 km/l en ciudad, 17,8 km/l en carretera y 13,9 km/l en régimen mixto. De ejemplo, el Toyota Yaris y el Honda City, promedian cerca de 17 km/l mixto.

Todo lo demás, lo que tiene que ver con el chasis, es impecable, herencia de los desarrollos en Europa. Por lo mismo, la dirección tiene buen tacto y un agradable radio de giro, su andar es muy insonorizado y su chasis se percibe firme a la torsión. Incluso, parece ser que el tercer cuerpo le ayuda a perder la aspereza que sentimos en el Polo, logrando una conducción más aplomada.

Conclusiones

Tal como señalamos, al Virtus le toca un segmento muy competitivo, pero menos exigente. Y al contrario del Polo, el Virtus se coloca como una interesante alternativa a sus rivales sedanes, especialmente por lo refinado de su chasis, su alto nivel de seguridad y su buen paquete tecnológico, además de una excelente habitabilidad y capacidad de maletero.

Claro que hay puntos negativos a tener en cuenta, como la gestión de la transmisión automática, su consumo y la calidad de sus plásticos interiores.

Estamos claros que nuestra versión Limited no es competencia y su elevado precio de $14.490.000 lo pone en otro segmento, donde claramente sale perdiendo. Para el que lo quiera, ahí está, pero si buscamos un modelo más equilibrado, sin dudas que las variantes Comfortline AT o Highline MT son las indicadas, con precios entre los 11.3 y 11.8 millones de pesos, similares a las versiones más altas del Kia Rio4, el que puede ser su rival más directo. Sin embargo, sigue siendo caro al lado de la agresiva propuesta de valor de los modelos de Citroën y Peugeot, junto al equilibrado Yaris en su versión GLi, todos bajo los 11 millones de pesos.

El Virtus es un buen sedan, equilibrado y que se percibe mucho más contemporáneo que su competencia en cuanto a su manejo, plataforma y prestaciones de seguridad, además de tener una impronta más elegante. Claro que esto tiene un costo mayor que tienes que estar preparado a asumir.