Chevrolet añade a la gama de la Captiva las esperadas versiones con transmisión automática, algo que había sido anunciado durante la presentación del modelo de origen chino en abril de 2019.
Lo nuevo acá es la transmisión variable continua CVT, que incluye siete relaciones preajustadas, y que gestiona el mismo motor que ya conocíamos hasta ahora: el cuatro cilindros de gasolina, 1.5 litros turbo, que eroga 147 Hp y 230 Nm de par, con tracción en el eje delantero.
La nueva Captiva CVT se ofrecerá en versiones de cinco y siete plazas, y tanto en su estética como en sus dimensiones es exactamente igual a las variantes mecánicas. Mide 4.655 mm de largo, 1.835 mm de ancho, 1.760 mm de alto y tiene 2.750 mm entre los ejes, dejando en el maletero 429 litros de capacidad por detrás de la segunda fila de asientos.
La Captiva LT 1.5T CVT es un espejo de la variante LT mecánica, y por lo mismo, cuenta con sólo cinco asientos.
En equipamiento incluye aire acondicionado, controles de audio en el volante, pantalla táctil de 8” con bluetooth (pero sin conexión a Apple CarPlay y Android Auto), asientos tapizados con cuero sintético, sunroof, llantas de 17” bitono, focos delanteros halógenos, luces diurnas LED, neblineros, barras en el techo, vidrios y espejos eléctricos, airbags frontales y laterales, frenos de disco en las 4 ruedas con ABS y EBD, control de estabilidad (ESP), sensor de retroceso con cámara, asistente de arranque en pendiente (HSA) y anclajes isofix, entre lo principal.
Su precio es de $13.590.000, esto es $800.000 más cara que la Captiva LT con caja manual.
La segunda opción es la Premier 1.5T CVT, la que ofrece siete plazas y el mismo equipamiento que la Captiva Premier manual. A lo anterior añade sensores delanteros, monitor de presión de neumáticos, marcadores digitales a color de 7", smart key con botón de encendido, freno de mano eléctrico, espejos laterales abatibles eléctricamente, y asiento del conductor con ajuste eléctrico, entre lo principal.
Test drive Chevrolet Captiva