Hoy el Versa es un modelo completamente remodelado y que habla bastante de como Nissan está tratando de enfrentar su propia crisis a nivel global. Se vienen nuevas renovaciones, más electrificación y mayor contenido en equipamiento, algo que al menos en este Versa, es uno de sus puntos fuertes y que marca un punto de contraste al lado del Versa anterior. Nissan va a dejar de ser una marca 100% masificada dentro de un tiempo y se concentrará en productos de mejor calidad para levantar su imagen y maximizar márgenes, culpa del agresivo plan de expansión liderado por el prófugo Carlos Ghosn.
De dimensiones, el Versa es más largo, más ancho y más bajo que el modelo anterior, dándole una proporción más deportiva y mejor resuelta que el anterior. Contempla 4.495 mm de largo, 1.740 mm de ancho, 1.465 mm de alto (1.475 mm en el modelo tope de linea) y 2.620 mm entre ejes. El maletero presenta 466 litros en las versiones Sense (sin asientos divisibles) y 482 mm en los demás, como el caso de nuestra unidad, un modelo Exclusive (tope de linea).
El diseño toma prestado bastante de los últimos modelos de la marca. Yo citaría directamente al Nissan March europeo, al Qashqai y al Kicks, así como el venidero nuevo Sentra. Vemos focos muy aguzados, una máscara en color piano black, con el diseño V-Motion de Nissan, neblineros rectangulares y un diseño de parachoques que trata de imitar los pliegues de un faldón deportivo.
Hacia atrás destaca la cintura ascendente, que termina en los focos traseros, elongando la linea del Versa. El pilar C es más aguzado y cuenta con el mismo diseño que llevan los modelos ya mencionados, que implica un corte para dar la impresión de un techo flotante, aparte de un quiebre ascendente en la puerta trasera, que acompaña este efecto. La zaga tiene focos alargados con una gráfica más de tipo “boomerang”. Luce con más carácter que los focos redondeados del Versa anterior. En la parte inferior asoma un difusor color carrocería; un interesante detalle en diseño que no es común en el segmento.
Puertas adentro, todo nos recuerda un poco al Kicks y eso es bueno, en contraste con el austero interior del Versa anterior. En el caso de esta versión (Exclusive) tenemos, además, manillas cromadas, un panel de ecocuero que reviste parte del tablero y tapicería bitono en el mismo material. Lógico, que vamos a encontrar algunos materiales duros, pero porque no estamos hablando de un auto de lujo. También del Kicks se hereda el volante recortado multifunción, el cuadro de instrumentos mixto (disponible desde el modelo intermedio) y el sistema multimedia con pantalla de 7” y soporte para Apple CarPlay/Android Auto, este último de serie en todas las versiones.
Y hablando de equipamiento de serie, lo más notable del Versa, es su seguridad, algo que es triste de celebrar, puesto que debería ser el estándar, pero, aun así, desde el modelo base incorpora seis airbags, frenos ABS con EBD y asistente, sensores de retroceso, anclajes ISOFIX, asistente de ascenso en pendientes y ESP. Además, nuestro auto lleva alerta de punto ciego y trafico cruzado, alerta de colisión frontal con frenado automático y cámara en 360 grados con detección de personas y objetos, cortesía del paquete Safety Shield de Nissan. Todo esto, en un Versa. ¿Cuándo lo íbamos a creer?
Volviendo al interior, podemos decir que, a pesar de lo moderno, sigue siendo un auto sencillo y ergonómico, fácil de operar y de grata postura en sus asientos, aunque por culpa del ecocuero, los cojines se nos antojan algo duros. Los asientos de atrás son más cómodos y amplios, ligeramente abutacados y ofrecen espacio para cuatro personas. Un quinto, como siempre, quedará más apretado en el medio, pero al menos no sufrirá con la espalda, porque el acolchado del apoyabrazos, es blando. Lo que sí es de notar, son los apoyacabezas traseros, los cuales no son independientes y están integrados a los respaldos. También hay puertos USB para las plazas traseras, algo positivo de destacar en tiempos conectados como los que vivimos.
La visibilidad si se ve algo penalizada por la luneta trasera, por lo estirada y corta que nos queda.
Al volante, el Versa es motivado por un motor HR16DE 1.6 de 16v, que también podemos encontrar al frente del Kicks. Tiene 118 Hp y 149 Nm de torque, cifras que se pueden administrar con una caja manual de cinco velocidades o una automática CVT como en nuestro caso, la cual cuenta con un programa llamado D-Step Logic, que trata de marcar más los cambios en la caja para evitar esa sensación continua de patinaje que tan poco gusta de estas transmisiones.
Nissan ha trabajado bastante en estas CVT a lo largo de varios años y al menos esta caja, nos gusta por como se adecua al perfil urbano del auto y a su motor. Esta sinergia le permite salir con agilidad en semáforos, abrirse camino rápidamente y, si eres generoso con el pedal, lograr buenos consumos. El 3CV homologa entre 12 y 20 km/l para el Versa; nos acercamos más al consumo en carretera que al de ciudad, más cercano a los 10 km/l. No son malos índices, pero podrían ser mejores. Ahora, no es un auto para andar dándoselas de piloto, ni siquiera en el modo Sport.
De dirección es ligero pero adecuado y agradable para su uso urbano. La suspensión es un tanto seca y la sensación se acrecienta con los asientos algo rígidos. Nada desagradable, pero quizás los modelos con llantas de 16”, se sienten un poco más confortables en ese sentido. Lo que mejora también es el movimiento inercial del auto, puesto que se percibe un centro de gravedad más bajo, lo que aploma más al auto a la calle, para una sensación de mayor seguridad.
El Nissan Versa tenía bastante margen para mejorar y por fortuna, la oportunidad fue muy bien aprovechada. Muy loable es la apuesta en seguridad que repetiremos, nos sentimos mal de celebrar, puesto que este debería ser el estándar en todos los autos y todas sus versiones. Mantiene sus cualidades ergonómicas y su generosa habitabilidad, pero con un manejo más disfrutable y una mejor calidad, sin contar que su diseño es muchisimo más atractivo y deseable.
Si, hay algunos detalles menores que hemos ido puntualizando a lo largo de esta reseña, pero a lo que más tienes que ponerle ojo es al precio, puesto que el Versa es un auto más maduro y además Nissan comenzará paulatinamente a posicionarse un poco más arriba de como estaban, con autos más equipados y de mejor calidad, para dejar de apuntar a las ventas masivas y revalorizar su marca con productos que no sean sinónimo de "barato". Esta estrategia comenzará a desplegarse mundialmente a partir de este año y el Versa, así como el futuro Sentra y los modelos que se vienen para la marca japonesa van a ir en esa linea. Tendrás que pagar más, pero te vas a ir con un mejor auto y uno mucho más completo de lo que esperabas por el apellido "Versa".
Test Drive Nissan Versa 2020