Poco tiempo después de recibir los cambios de media vida para el BMW Serie 5, era cosa de tiempo para ver estos nuevos cambios en el siempre espectacular BMW M5. Estas mejoras estéticas se alinean con el nuevo lenguaje de diseño que la marca alemana está impulsando en sus más recientes modelos, con novedades que se han comenzado a sentir con la linea de SUV de la marca y luego en modelos como el Z4, el Serie 3, el Serie 1, el Serie 8 y más recientemente, el Serie 4, aunque por fortuna, sin esa grotesca parrilla vertical.
Lo que cambia por fuera
Con respecto al M5 anterior, los cambios más notorios son definitivamente los ópticos, tanto los delanteros como los traseros, con tecnología de matriz de laser en el caso de los frontales y LED en la parte trasera. Como señalamos con el Serie 5 anterior, se despiden los últimos vestigios de los famosos "Angel Eyes" que llevaron por mucho tiempo los BMW y que luego fueron mutando hacia formas más hexagonales. Hoy, la firma luminosa frontal de BMW es una doble L, que hace juego con las L que también podemos encontrar en la gráfica de los focos traseros, con carcasas ahumadas.
La parrilla ha crecido un poco y ahora es de una sola pieza. Las lamas dobles que han sido tradición en los modelos M, también llevan un nuevo diseño. El parachoques trasero también fue revisado, al igual que la tapa del maletero, aunque este cambio es parte de las modificaciones recibidas en el Serie 5. Las carcasas de los espejos y el techo están fabricadas en plástico reforzado con fibra de carbono.
Ojo, que los modelos Competition, como en de la foto, aparece con muchos accesorios de color negro brillante, para diferenciarlo del modelo normal. Esto incluye a las molduras decorativas de ambos parachoques, la parrilla, los espejos, las llantas y un discreto lip sobre el maletero, aparte claro de las insignias específicas. Esta versión aparte puede conseguirse con las llantas de 20" del M8 y algunos colores especiales cortesía de BMW Individual, como el Gris Brands Hatch, el Rojo Motegi metálico, el Azul Tanzanite II metálico, el Rojo Aventurine II metálico y el Frozen Bluestone mate.
Lo que cambia por dentro
En el interior, también hay cambios, como una nueva pantalla multimedia de 12,3 pulgadas, más grande y legible. Aparecen dos nuevos botones de acceso directo en la consola central, cerca del selector de cambios. Uno es el "M-Mode" que permite cambiar entre dos modos de manejo: Road, que es el estándar, con todas las asistencias activadas y Sport, con las asistencias solamente emitiendo alertas y no actuando sobre el auto, salvo la alerta de colisión con frenado de emergencia y el asistente de evasión. El modo Sport también habilita la interfaz M para el cuadro de instrumentos y para el Head-Up display.
Arriba del botón "M-Mode" está el botón "Setup" que te lleva directamente al menú M para que tú ajustes manualmente los parámetros del auto (sistema de tracción, DSC, motor, transmisión, amortiguación, dirección y displays de información) y hagas tu propio modo de manejo, el cual podrás activar con los botones M1 o M2 en el volante.
El M5 Competition habilita un modo de manejo extra llamado "Track", el cual deshabilita todas las asistencias de seguridad, mutea el sistema de audio y desactiva la pantalla del sistema multimedia. También desactiva los intermitentes de emergencia en caso de frenada brusca. Este modo está hecho solamente para pista y permite tener el control absoluto del auto, dejando el 100% de la responsabilidad del pilotaje en tus manos.
BMW ofrecerá también dos opciones de asientos, los M Sport estándar y los M multifunction con cabeceras fijas y un logo M5 retroiluminado, aparte de reglajes eléctricos extra.
Sobre las asistencias de manejo y equipamiento tecnológico, se hereda todo del Serie 5, incluyendo el nuevo soporte para Android Auto, la llave digital que funciona en Smartphones con tecnología NFC y más.
Performance inagotable
El motor se mantiene igual, es un V8 de 4,4 litros con tecnología TwinPower Turbo, el que eroga 600 Hp y 750 Nm de torque. El modelo Competition desarrolla 25 Hp más, para un total de 625 Hp. Ambos se asocian a una transmisión Steptronic de ocho velocidades. El M5 Competition alcanza los 100 km/h en apenas 3,3 segundos y una velocidad final limitada en 250 km/h en ambas versiones. Si pides el paquete M Driver, puedes desbloquear el velocímetro hasta los 305 km/h. Como siempre, gracias al programa Drivelogic, puedes ajustar el performance de la caja de cambios con distintos modos. También puedes ajustar el ronquido del escape, para que no molestes a tus vecinos, o viceversa. Está demás mencionarlo, pero recuerda que el M5 ahora es un auto con tracción a las cuatro ruedas, pero al que le puedes desactivar el tren delantero cuando actives los parámetros más extremos.
Otra característica especial del M5 Competition son las monturas del motor, las cuales son más rígidas, lo que permite una mayor conexión con el auto y un manejo más fiel.
Los frenos de disco son de material compuesto y BMW permite personalizar los cálipers con tres colores: negro, azul o rojo. Como opcional están los frenos carbono/cerámico, con cálipers dorados y que no solo permiten frenar mejor (por su resistencia a la fatiga por temperatura), sino que también bajar el peso en 23 kilos.
