Ante el aumento de nivel registrado en los últimos meses, es probable que la industria de los autos ecológicos -incluidos vehículos 100% eléctricos (BEV) y vehículos híbridos plug-in (PHEV)- experimente ventas totales de más de 2,5 millones de unidades, lo que es casi un 3% del total de los vehículos comercializados en el mundo.
La popularidad que están teniendo los vehículos cero emisiones se debe en gran parte a los avances en cuestiones como la autonomía, la reducción de los precios y el aumento de la oferta en varios segmentos.
Sobre esto último, se tiene previsto que para finales de 2020 existan más de 450 opciones de coches con tecnología eléctrica: 300 BEV y 150 PHEV.
Los números hablan
Otra cosa que llamó la atención es que a pesar de que durante 2019 y lo que va de 2020 el mercado automotor mundial está registrando caídas en las ventas, el segmento del que nos ocupamos continuó creciendo, al tener un aumento del 8,8% interanual. Igualmente, el incremento en 2019 fue el más bajo de la década debido, principalmente, a la desaceleración de las ventas en China producto del fin de ciertos estímulos fiscales.
Si nos centramos en las regiones, Europa experimentó el mayor crecimiento, mientras que en China se vivió la mayor desaceleración, especialmente desde la segunda mitad de 2019 y a causa de la eliminación de incentivos monetarios. Igualmente, el Dragón Asiático continúa liderando el mercado con más del 52,5% de cuota de mercado, seguido por Europa y Estados Unidos, con un 26% y 14% de participación, respectivamente.
Con respecto a la tasa de penetración, Noruega continúa liderando al contar con un 60%, es decir un 5% más alto que en 2018.
La situación de los periféricos
Lo que también creció a la par de las ventas de los vehículos eléctricos son las estaciones de carga públicas. Al día de hoy se tiene el registro de más de 320.000 centros de recarga públicas, incluidas las estaciones de carga de CA y CC, instaladas en todo el mundo. Además, el mercado global de reciclaje de baterías EV generó ingresos por más de US$10 millones en 2018 y se espera que alcance US$6.524 millones para 2025, expandiéndose a una tasa compuesta anual del 151.5%.
Actualmente, los procesos de reciclaje para las celdas de batería de iones de litio se centran en la recuperación de cobalto, níquel y cobre, debido a sus precios comparativamente altos y la facilidad de recuperación en el proceso pirometalúrgico.