"Al mando de dos instructores, la pista consistió en un serpenteante trazado de asfalto que básicamente es el acceso al recinto de Santa Martina (que para quienes no han ido, es un camino bastante peligroso de ir muy rápido) más una zona off-road con largas trepadas de tierra y de una complejidad un poco más baja que en la prueba anterior, pero donde el tren motriz mostró absoluta suavidad y una entrega progresiva de potencia, así como un nivel de tracción de poco patinaje y fácil encuentro del grip deseado.
Y fue aquí, en esta prueba mixta donde la Clase X mostró su potencial. Logrando velocidades superiores a 100 km/h en tramos revirados y sin control de tracción, los instructores atacaron cada tramo de asfalto como si se hubiesen olvidado que es una camioneta. Exhibiendo un muy controlado nivel de transferencia de masas, una capacidad de frenado optima y un agarre alucinante (porque no hay otra palabra para describirlo), la camioneta se transformó prácticamente en un GLC. Hacer esto con cualquier otra camioneta (incluyendo sus hermanas) sería imposible sin un seguro de vida firmado, un pañal o un balde de por medio, pero aparte de lo emocionante, el nivel de seguridad que entrega el manejo de esta camioneta en estas condiciones, llevadas al extremo, habla del nivel de desarrollo que Mercedes ha impuesto sobre esta plataforma."
Al menos, en lo personal, fue un momento clave para darme cuenta del potencial que puede tener una plataforma en las manos correctas, como es el caso de esta, tomada prestada de la Nissan NP300, pero que como hemos repetido hasta el cansancio, se la lleva al hombro.
¿Qué cambia fundamentalmente?
Lo principal, con respecto a la X250d que ya conocemos, es su tren motriz, que era la promesa de Mercedes con respecto a esta camioneta, que iba a tener bastante más que una reingeniería de chasis. De hecho, la estructura de la X350d está aún más reforzada y diferenciada de la X250d, que ya viene modificada con respecto a sus hermanas utilitarias de Nissan y Renault. También se tocó la suspensión, cosa que pudiera lidiar con la potencia que desarrolla el motor que se le ha dotado, un V6 de 3 litros Turbodiésel, que cumple funciones en otros modelos de Mercedes, con 258 Hp y 550 Nm de torque, aunado a una transmisión Mercedes 7G-Tronic automática y a un sistema de tracción 4Matic, también de propiedad Mercedes.
El sistema de tracción a las cuatro ruedas, es menos robusto que el que emplea la X250d, pero es más inteligente. Corresponde a un sistema integral AWD automático (4MAT) con opción 4H (seleccionable hasta 80 km/h) y 4L (solo detenida en neutro). El modo automático puede alcanzar un máximo del 60% del torque al eje trasero, pero variable a convenir según las pérdidas o la demanda. Con 4H, el sistema se fija en una relación 30:70, mientras que 4L deja todo prefijado en 50:50. También hay disponible un bloqueo electrónico del diferencial trasero, en caso de necesitar aún más tracción.
Aparte, Mercedes ha dotado a la X350d con el programa Dynamic Select, que permite disponer de cinco modos de manejo, Comfort, Eco, Sport, Manual y el modo Off-Road que permite aguantar un poco más los cambios de marcha y aletarga la respuesta del acelerador, lo suficiente para que el torque del motor no nos juegue en contra en superficies deslizantes o de poco agarre.
Finalmente, está el control de descenso, que limita a 8 km/h en 4H y 5 km/h en 4L nuestra velocidad.
Configuración
La X350d llegará con equipamiento Power. Esto incluye focos LED High Performance, alzavidrios eléctricos one-touch en plazas delanteras, sistema Parktronic de sensores de estacionamiento, cámara en 360 grados de alta resolución, volante de cuero multifunción con control crucero (Tempomat), asientos con tapiz símil cuero Artico y microfibra dinámica (gamuza), con reglajes eléctricos y calefacción para las plazas delanteras (las primeras unidades podrían equipar tapiz 100% de cuero natural), espejos de ajuste y plegado eléctrico, calefaccionados, climatizador Thermotronic dual, acceso y arranque Keyless Go (sin llave), sensores de luz y lluvia, sistema Audio 20 CD con pantalla a color de 7", puerto USB, Bluetooth y 8 parlantes, clúster de supervisión a color de 5", neblineros e iluminación para la zona de carga. Quedan al debe, el GPS y el soporte para Apple CarPlay o Android Auto, así como un sistema de audio premium y una interfaz más moderna, la que de seguro llegará con un futuro facelift.
En cuanto a seguridad, ofrece 7 airbags, control de tracción y estabilidad (ASR+ESP), supervisión inalámbrica de la presión de los neumáticos, anclajes ISOFIX, frenos de disco en las 4 ruedas con ABS+EBD y asistente de arranque en pendiente.
Capacidades
Idéntica a la X250d, mide 2.113 mm de ancho (con retrovisores), 1.819 mm de alto, 5.340 mm de largo y 3.150 mm entre ejes, con un despeje al suelo de 220 mm, considerando que lleva llantas de 19". Puede cargar 1.067 kilos y remolcar 750 kilos. Si el remolque tiene frenos, esa cifra puede elevarse hasta los 3.500 kilos. Tiene un ángulo de ataque de 29 grados, un ángulo de salida de 24 grados y un ángulo de inclinación de 49 grados. Puede vadear hasta 600 mm sin problemas. El cajón de carga está diseñado para que quepa un pallet sin ningún problema. El peso bruto sube de 3.150 kilos a 3.250 kilos.
En terreno
Mercedes Benz, de manera didáctica, nos generó dos pruebas de rendimiento para la X350d durante su lanzamiento en Melipilla. La primera prueba consistió en un pique, similar a un cuarto de milla, versus un GLE 250d 4Matic como referencia. Salir de cero con la X no es problema, a pesar de que no tiene Launch Control (obvio que no, es una camioneta). Basta con pisar a fondo el pedal del freno y el acelerador, el cual queda justo en las 2.500 RPM. No te demores, que la caja se protege y baja a las 1.900 vueltas, con las que perderás fuerza. Con la tracción en modo 4MAT y el programa dinámico en Sport, soltamos el freno y dejamos que los 258 Hp galoparan a sus anchas. Logramos 16 segundos con 30 centésimas, siendo Autocosmos el medio más rápido del lanzamiento.
Luego, una prueba más dura. Usaríamos una X350d cargada con 1000 litros de agua en su cajón y cinco ocupantes, a una ruta off-road que básicamente era trepar un cerro. El camino no era exactamente el Dakar o el Camel Trophy, pero si angosto, empinado y con algunas zonas complejas, suficientes para medir las aptitudes de la X y ver como se esfuerza.
La verdad, es que el eje trasero Multi-link con elementos de eje rígido, está pensado para el confort y lo hace notar. Aunque a veces sentimos el tope, con el recorrido exigido a fondo culpa de la carga, nunca nos dolió nada en ningún bache y nos hacía creer que la camioneta aún tenía unos milímetros extra. La dificultad estaba en la carga, de tipo líquido, la cual se bambolea bastante. Eso nos reveló un defecto que nace de un atributo de la Clase X; si, se banca todo el peso tranquilamente, pero la carga no va tan plana como puede ser en otras camionetas. Una por otra.
El motor poco se siente y es de entrega suave. Parece que no se estuviera ni siquiera esforzando. Y el chiste era detenerse en una pendiente, seguir, hacerla trepar, ver como subía con neumáticos de asfalto y todo como si nada.